Tras el éxodo desde el sitio de Montevideo, llamado «la redota», Artigas acompañado por 10.000 personas acampa en las cercanías del Ayuí.
En octubre de 1811, el ejército artiguista, triunfante en la batalla de Las Piedras, que había debido levantar poco antes el primer sitio de Montevideo ocupado por las fuerzas del Virrey Francisco Javier de Elío, y constituido su campamento en las márgenes del río San José, cerca de la ciudad de San José de Mayo.
La firma del Armisticio, al retirársele el apoyo de la Junta de Buenos Aires, colocaba al campamento oriental en una situación insostenible, a merced de las fuerzas españolas de Montevideo.
Por ello, el 23 de octubre de 1811, al conocerse la noticia de que el Armisticio finalmente se había celebrado con el consecuente retiro del ejército enviado por Buenos Aires, a las órdenes de Rondeau, se hacía ineludible la retirada de las milicias orientales, inferiores en cantidad y en armamento a las fuerzas españolas.
La travesía por el territorio oriental, llamada «la redota» arriba a Salto y Artigas dispone, el 14 de diciembre, efectuar un relevamiento de las personas que integraban la columna, dando lugar al histórico documento conocido como Padrón de las Familias Orientales.
La columna se dispuso entonces a atravesar el río Uruguay, como medida de defensa ante las fuerzas portuguesas del Brasil, y españolas de Montevideo.
En enero de 1812, desplazándose por la costa oeste del Uruguay, llegaron a la costa del arroyo Ayuí, al sur de la actual Concordia, acampando definitivamente en sus montes.
«La redota” reforzó lazos de solidaridad, acentuando el sentimiento de colectivo con individualidad propia; agudizó también la separación con Buenos Aires, en tanto que se fortalecieron las relaciones con las demás provincias.